• Invierte en la cocina y el baño: esas son las habitaciones de una casa que causan la impresión más fuerte en los compradores de vivienda, pero también las que se pueden volver anticuadas más rápidamente, los acabados y otras decoraciones pasan de moda. Esto hace que las mejoras en la cocina y el baño sean un excelente lugar para invertir tu dinero.

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• Considera la eficiencia energética: tanto los propietarios, como los potenciales compradores de vivienda, ponen cada vez mayor énfasis en las características ecológicas de un inmueble, tanto como una forma de ayudar al medio ambiente, como de buscar alternativas que reduzcan el monto que se paga de agua, gas y electricidad. La eficiencia energética favorece al bolsillo y es un gran atractivo inmobiliario.

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• Crea tu espacio para home office: los días de ir a la oficina de 9 a 6 todavía no han vuelto y muchas empresas han adoptado el trabajo híbrido permanentemente por lo que tener un área específica de trabajo en casa es importantísimo. Los estudios dedicados a la oficina en casa son una solución al reto de la realidad actual y sin duda añaden valor a un inmueble, pues favorecen el trabajo, brindan privacidad, lucen mejor que una oficina improvisada en la sala o el comedor y, sobre todo, son más cómodos.

 

Recuerda que una casa que gana valor con el tiempo puede darte una gran ventaja financiera cuando estés listo(a) para vender y mudarte..

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